Si hay algo que proporciona una gran satisfacción personal es fijarse una meta y poder conseguirla, ya sea en el ámbito personal o profesional. Muchas veces el querer conseguir alcanzar algo, nos hace salir de nuestra zona de confort y creedme que eso es lo que lo hace realmente atractivo.
Focalizarse en algo no es más que estar plenamente concentrado y dispuesto a lo que nos vamos a proponer, poniendo toda nuestra atención en ello. Pero para poder llegar a nuestra meta u objetivo, no sólo se necesitan ganas, también hay que tener en cuenta varias cosas:
- Es importante que los objetivos que nos marquemos sean realistas y alcanzables. No hay que ser fantasioso y saber en cierta manera si lo que queremos es factible.
- De la misma manera que debemos pensar si lo que nos proponemos es real, debemos pensar y analizar los posibles problemas que se pueden encontrar y ocurrir durante el camino de nuestro trabajo.
- Normalmente, cuando se inicia un proyecto, las ganas y la motivación nos desborda. No vemos momento de parar de soñar. Pero si el trayecto a recorrer es largo y queda mucha tarea por hacer, es conveniente ir de menos a más, pasito a pasito y ser constante.
- Para que no se haga tan pesado el tiempo hasta poder llegar a alcanzar nuestros objetivos, podemos marcarnos «mini metas» durante el proceso. Para así ir disfrutando de los pequeños logros.
Y por qué este post? Porque creo que es super interesante marcarse un objetivo. Como sabéis me ha dado fuerte con el correr, disfruto de ese momento, a mi ritmo, a mi aire y me encanta.
Después de haberme marcado muchas metas factibles, he decidido correr mi primera media maratón. Puede parecer una tontería, pero me gusta hacer las cosas con prudencia y por ello voy a entrenar a consciencia, para llegar con los deberes hechos. Con una mente fuerte, y un cuerpo y corazón preparados.
Hasta que llegue el momento de empezar a entrenar en serio, voy a ir preparando el terreno y como no, focalizando mi objetivo. Me acompañas??? #roadtobehobia
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